APÉNDICE 6 DESCRIPCIÓN DEL PUESTO ADMINISTRADOR TEMPORAL
TIPOS Y LÍMITES DE TIEMPO:
Se puede nombrar a un Administrador Temporal por varias razones, que incluyan:
Mientras que un pastor esté de vacaciones sabáticas o por ausencia médica.
Mientras que una parroquia esté esperando un liderazgo pastoral permanente.
El Administrador Temporal puede ser designado a tiempo completo, a tiempo parcial o fuera del lugar como el líder pastoral canónico durante este período provisional.
No importa el motivo de la cita, existen principios y deberes rectores que definen el puesto.
PRINCIPIOS RECTORES
El Administrador Temporal asegura que la vida parroquial continúe mientras la comunidad espera a su líder pastoral permanente y no hace innovaciones permanentes.
El Administrador Temporal debe tener precaución al tomar decisiones que afecten la vida pastoral de la parroquia;
Debe trabajar estrechamente con el Vicario Regional y cualquier cambio debe ser acorde con la indicación del Vicario; p.ej.:
Prácticas Litúrgicas (por ejemplo, cambiar el horario de las misas o implementar nuevas prácticas);
Planta Física (por ejemplo, las renovaciones de los edificios, e inclusive la rectoría, no se podrán realizarse modificaciones permanentes durante el período intermedio);
Personal (por ejemplo, crear o eliminar nuevos puestos) – (la lista tiene el propósito de ser ilustrativa, no exhaustiva).
El Administrador Temporal por definición es "temporal" y principalmente una función de carácter "administrativa". No se deben realizar alteraciones permanentes de ningún tipo durante este tiempo.
El Administrador Temporal estará en consulta regular con el Vicario Regional y la Oficina del Personal del Clero.
DEBERES:
El Administrador Temporal mantendrá el cuidado pastoral de la comunidad parroquial asegurándose de que:
Los servicios litúrgicos estén programados y cuenten con personal;
Las deudas contraídas a través del funcionamiento normal de la parroquia se paguen;
Las organizaciones parroquiales cuenten con personal y funcionen correctamente;
La administración diaria de la parroquia esté en funcionamiento;
Todos los empleados sean supervisados y compensados de manera justa; y
Todas y cada una de las directivas del Arzobispo, los Vicarios y los Servicios Centrales se implementen según las instrucciones, especialmente aquellas específicamente dirigidas, y que sean beneficiosas para la parroquia, ya que anticipan el nombramiento y la llegada del líder pastoral.